EL PAPEL DE LA RADIOLOGÍA

Como la investigación debía realizarse en el mismo monasterio, se instaló en las Salas Góticas, antigua biblioteca donde trabajaban los amanuenses de la abadía, situada en el primer piso, un moderno equipo portátil de radiología con el fin de revelar in situ, todos aquellos huesos que fueran considerados de interés por los especialistas en su estudio antropológico, comprobar la cualidad de las placas y radiografiarlos de nuevo desde diferentes ángulos.

En este aspecto, la radiología tiene asignado un papel muy importante en la investigación de restos óseos o momificados, susceptibles de analizar. El mero hecho iconográfico, realizado en el mismo lugar de los hechos, permite una observación directa y un estudio inmediato para la recogida de datos, y que una vez terminado este primer trabajo de campo, permite, ya lejos de los propios restos, proseguir sus estudios a distancia, sin perder el contacto, y enviarlos donde proceda de manera ágil y eficaz.

A través de la radiología, pueden observarse las afecciones que les afectaron, tanto tumorales como degenerativas, sistemáticas, y de manera fundamental, las infecciones que son posiblemente las más expresivas. Gracias a las huellas que el propio desarrollo muscular deja impreso, de manera indeleble en sus correspondientes inserciones óseas, alteraciones articulares que van a delatar, por otra parte, la prolongada permanencia en determinadas posturas, actualmente anacrónicas, que permiten comprender los hábitos y las profesiones de determinados individuos, sin olvidar los pequeños, pero reiterados traumatismos cotidianos, cuyas secuelas permanecen imborrables en los huesos.

Tampoco podemos obviar las secuelas dejadas por intervenciones médico-quirúrgicas , de las que se puede observar si sanaron, o  no, de ellas. Gran importancia tienen también los traumatismos , de los que se puede observar su evolución, y las fracturas , que permiten saber si hubo posterior consolidación y la manera cómo se realizó. En otros casos, permite determinar si dichas fracturas fueron provocadas post-mortem.